Mis zapatos se ordenan solos en la noche.
Son mis días los que desordenan pies y sendas.Me calza Dios y me desgasto.
He roto los cordones y ando sola en el mundo.
Soy la horma del destino.
Doy tumbos.
me distraigo,
vuelvo sobre mis pasos
y si me clavo alguna espina
dejo que la absorba mi cuerpo.
María Gabriela Lovera
(En Atrabiliario, Artifex, Madrid, 2009)
Turin, 1837-39. Lithograph. National Library of Medicine
1 comentario:
gracias por tu comentario en mi blog, Gabriela, volveré a pasearme por aquí, en éste tu jardín tan agradable.. (me ha gustado la referencia a Varda)
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